¡Cristo ha Resucitado!. Sonaría desde la megafonía del balcón de la cadena cope mientras se escucha el himno de la Alegría y el fervor estallido de júbilo del gentío que acompaña a los tronos mientras estos se preparan para realizar el primer baile al son del vals interpretado por la banda de cornetas y tambores de Nuestra Señora de los Dolores.
Mientras todo eso ocurre nuestros músicos están tomando el almuerzo y cogiendo fuerzas para la carrera que les espera.

Este año sonara por gentileza de la cadena cope el encuentro retransmitido de hace dos años. No habrá gente alrededor de los tronos, nuestros músicos no estarán en la parte de atrás de la Plaza de Abastos esperando al "Albacete" para que nos abra su coche y nos dé el bocadillo.
Este año a sido una Semana Santa rara, diferente, peculiar. Acaba con Jesús resucitado y no podemos ver cómo se abre la tumba y sale la paloma, ni tampoco los modelitos que nuestros amigos llevan.
Este año no podremos comer todos juntos en familia ni entregar los premios que la banda con salero y gracia se entregan entre sí.

Pero la vida son recuerdos. Recuerdos buenos y malos que nos hacen afrontar el hoy y el mañana con más ilusión que nunca. Por eso hoy le toca a una de esas mujeres que lucha siempre por el bien de nuestra agrupación. Ella es Noelia, tambor, y nos va a contar sus recuerdos de Domingo de Resurrección.

Llegó el día que todos esperamos, Domingo de Resurrección, y con él nuestros nervios y tristeza por saber que esta semana está a punto de terminar.
Pasamos el año entero preparandonos para esta semana, contando los días para que llegue y cada vez pasa más lento el tiempo, hasta que llega el momento y cambia todo, los días pasan como si de horas tratasen y en un abrir y cerrar de ojos, llega Domingo de Resurrección, para mí es el más bonito y el que más me hace disfrutar.

Suena el despertador a las 7 y con él se despiertan mis nervios, por fin podemos bailarla al son de "GUAPA". Como siempre, el director deja el el mensaje en whatsApp recordando a la hora que tenemos que presentarnos en la Hermandad, pues ya nos conoce y sabe la mala memoria que tenemos en la percusión y en la banda en general. Aunque muchas veces creo que le gusta y es su manera de tranquilizarse, ya que sabe que siempre llegamos.

Preparo las cosas, me coloco el traje y me voy con mis grandes apoyos de la agrupación para la Hermandad, por el camino siempre comentamos los nervios, pero sobretodo el sueño que tenemos, eso nunca falla.

Llegamos allí y empezamos a ser conscientes de que todo acaba, pero lo disfrutamos como siempre rodeados de todos los que nos apoyan.

Nos preparamos, afinamos instrumentos, formamos y David corriendo, siempre corriendo, nos indica qué tenemos que irnos ya, que llegamos "tarde". 
Dirección a la Iglesia vamos en ordinaria, y acompañados de todas las personas que forman la Cofradía, ellos siempre nos animan y nos miran con una sonrisa de orgullo en la cara, eso me hace sentirme segura y protegida dentro de esta familia.
Cuando ya estamos allí, todos salimos corriendo a beber algo y coger fuerzas. Y por fin, llega el momento del Encuentro.
Unos minutos antes de las 10 todas las bandas y agrupaciones salimos para el encuentro, en el que allí nos reencontramos todas las cofradías y empieza el disfrute de este día. 

A las 11 todo el mundo está preparado para este momento, y es que por fin todos podemos hacer bailar a nuestro titular en procesión , y yo me siento orgullosa de poder hacerlo con nuestra Maria Magdalena. Pero sobretodo me siento orgullosa de mis compañeros, cuando los nervios me comen siempre está Sergio y Vero para con solo una mirada tranquilizarme, ellos junto a Javi son mi gran apoyo en estos momentos.

Vamos avanzando y cada vez veo más cerca el momento de que acabe todo, pero a la vez no puedo evitar sentirme afortunada de vivir esa sensación desde dentro. Todo el mundo nos sonríe al pasar y disfruta con nosotros de esta procesión.
Siempre recuerdo a mi abuela, a mi madre, a mis tías, a mis primas decirme y chillarme guapa. Querer hacerme fotos y darme caramelos. 

Cuando llega el final, muchos no podemos evitar que se nos llenen los ojitos de lagrimas, pero tampoco podemos evitar el abrazarnos y mostrarnos lo orgullosos que estamos unos de los otros. Ese momento, para mí, es único.
Yo me abrazo con Sergio, mi pareja, luego con Vero, Javi, Carlos, en fin, con toda la percusión para luego ir a por las chicas de la trompetería, Irene, Natalia y acabar dandole un abrazo a todos y sobre todo a David. 
Después de las fotos, la cervececita y el saber que todo acabado nos dirigimos a la cofradía, satisfechos y orgullosos. 

Lo maravilloso de este día es la convivencia, llegamos y todos comemos juntos para despedir el año. David siempre nos entrega unos premios que nosotros mismos hemos votado y nos hace reír como de costumbre con sus tonterías, él está siempre para todos.
Y nosotros estaremos para ti por mucho tiempo David.

El recuerdo mas bonito que tengo, es el que vivi el primer año. Dicen que la primera vez es siempre la mas bonita y es verdad, por eso sigo aquí con mi familia azul y por eso seguiré muchos años.

Y con esto, acaba esta semana. Y nosotros volveremos pronto y con muchas ganas para preparar la próxima.